La construcción
de Rosario (II)
"Arquitectura
e Identidad", pragmatismo y poesía.
(viene
del número
anterior de café
de las ciudades)
La arquitectura
rosarina es parte esencial de los cambios operados en la ciudad
en la última década. Un
libro reciente, compilado por Hernán Bisman y
Claudio Robles (editores) con la colaboración de Nicolás
Campodónico y Nicolás Ribone en la selección
de obras, reúne imágenes y textos de esta arquitectura
entre 1998 y 2003. El volumen es tan austero y preciso como
el contenido de lo que presenta; las categorías temáticas
que propone resultan en si mismas una interpretación crítica
sobre la influencia del medio y del contexto de producción
del movimiento rosarino de arquitectos (volveremos sobre
este concepto), al establecer como secciones la correspondiente
a Ciudad, compuesta por obras municipales de autoría pública
o privada, la Arquitectura, en su mayor parte obras de pequeña
y mediana envergadura, y la Formación como instancia académica
de experimentación y de construcción de una identidad
local.
Ya en la introducción,
Aníbal Moliné explora aquella relación que
la reflexión disciplinaria y académica en el campo
arquitectónico tuvo sobre la construcción del Rosario
contemporáneo ("la continuidad y reiteración
de ciertos contenidos temáticos desarrollados durante el
aprendizaje proyectual han tenido una significativa influencia en
el proceso de toma de conciencia sobre los problemas y las oportunidades
que la ciudad y sus lugares presentan..."). La reciente
arquitectura rosarina presenta, como pocas en América Latina
(y quizás, en el ámbito global) una vocación
de colectivo profesional. La publicación de este libro
no es solo una compilación oportuna de obras vecinas en el
espacio urbano y en el tiempo de realización, sino una especie
de velado manifiesto acerca de esa voluntad de movimiento (más
que de "escuela") que recorre la obra reciente en la ciudad.
Obra que también puede considerarse como "de
la ciudad": determinados ejemplos evidencian la influencia
del parcelario urbano sobre la tipología arquitectónica,
presentan variantes contemporáneas de la edificación
en lotes estrechos y profundos, en el caso de la casa entre medianeras
de Sánchez Hermelo, Abatedaga y Schmitman, o en lotes de
tamaño mínimo como la casa Ocampo, o en pequeños
conjuntos de viviendas multifamilares como las Cuatro Casas, la
casa con patio de Soria y Munuce, o la Casa Rita. También,
en las resoluciones de las nuevas torres de vivienda frente al eje
costero, en el vértice de la trama urbana rosarina, que las
curvas y giros de dichos proyectos tienden a aprovechar e integrar.

Casa
entre medianeras;
Sánchez Hermelo, Abatedaga y Schmitman

Casa
Ocampo; Costa y Valenzuela

Cuatro
Casas;
Beltramone, Ponzellini, Costa y Valenzuela

Casa
con patio; Soria y Munuce

Casa
Rita; Palumbo y Rampulla

Edificio
Banco Comercial Israelita; Augusto Pantarotto
Claro que no
es solo la ciudad la referencia pragmática que se torna expresiva:
en las ventanas de la Casa Ligresti o las escaleras de la Casa Rita,
la Casa Estudio Viu o la Casa Ponzellini, la lucarna de la Casa
Guerrico, son cotidianeidades programáticas o constructivas
las que se convierten en elemento expresivo mediante una especie
de extrañamiento o de énfasis socarronamente sobreactuado.

Casa
Ligresti; Emilio Farruggia

Casa
Rita; Palumbo y Rampulla

Casa
Viu; Viu y Buzaglio

Casa
Ponzellini; Beltramone y Ponzellini

Casa
Guerrico; Sebastián Guerrico
Este racionalismo
pragmático o programático no está radicalmente
disociado de las experiencias más poéticas de Rafael
Iglesia, Marcelo Villafañe o Jorge Scrimaglio; por el contrario,
estas parecen una exacerbación de ese mecanismo aplicado
a funciones más sutiles o forzadas. En el caso de Iglesia,
sus estructuras por fricción y, en general, sus estrategias
proyectuales, parecen cercanas a aquella "delirante eficiencia"
que se ha señalado del cine de Búster Keaton. Un autodesafío
a lograr soluciones brillantes a problemas inexistentes (véanse
las estructuras del edificio Altamira), que erosiona la matriz funcional
de la disciplina. Y que quizás referencia irónicamente
a la necesidad de buscar una expresión de elementos austeros
en un contexto de escasez de medios.

Edificio
Altamira; Rafael Iglesia

Quincho
y piscina; Rafael Iglesia

Casa
Seoane; Villafañe y Rois
En otros casos se procura una fenomenología espacial y
programática (la Casa Seoane) o se superponen matrices
sofisticadas a casas banales de ciudad, como en la expansión
de la casa Moriconi, o en el bucle que abraza la casa consultorio
Bernardi. Distinto en concepto, pero semejante en el método
a las obras de Scrimaglio (cuya obra, quizás por las limitaciones
del criterio selectivo, no figura en este libro), un misterioso
personaje alejado del mundanal ruido, que transforma en poesía
la aparente banalidad de las paredes de ladrillo con huecos.

Casa
para un actor; Jorge Scrimaglio

Casa
Moriconi; Caballero, Bordi y Fernández

Casa
Consultorio Bernardi; Walter Taylor
La obra pública presentada en el primer tramo del libro presenta
una inusual voluntad de construcción de ciudad y calidad
proyectual, y una actitud experimental contenida por la necesaria
prudencia en el manejo de recursos escasos. Ya hemos
hablado de Paseo del Caminante y del Pasaje Juramento; los
ejemplos de espacio público, equipamientos de salud, y reciclajes
del patrimonio administrativo e industrial de la ciudad, completan
un panorama estimulante de realizaciones estatales que, conviene
destacar, son del todo coherentes con el carácter de reflexión
y actuación que encontramos en los ámbitos académico
y profesional independiente en las otras secciones de este volumen.

Hospital
de Emergencias "Dr. Clemente Alvarez";
Municipalidad de Rosario

Jardín
de los Niños "Juana Elena Blanco";
Municipalidad de Rosario

Centro
Municipal Distrito Norte "Villa Hortensia";
Municipalidad de Rosario
Resulta curioso el tramo temporal elegido para la compilación,
que coincide con el comienzo y el final de la gran recesión
argentina (criterio cronológico que, ya vimos, tiene por
cierto el problema de dejar fuera una producción significativa).
Con optimismo, Campodónico y Ribone consideran que "si
todo este proceso se produjo dentro de una profunda crisis económica
y política, es alentador imaginar cuanto más se pude
construir dentro de un contexto más próspero".
La rosarina es seguramente la arquitectura más comprometida
en la Argentina; cuando hace unos meses Iglesia desafió
los "códigos de silencio" de la profesión
al cuestionar el edificio neo-borbónico
que Adelman, Fourcade y Tapia están construyendo en la Avenida
del Libertador en Buenos Aires, su provocación recupera algo
de lo mejor de los debates de la arquitectura argentina del siglo
XX, desde los manifiestos modernos y las revistas del Centro de
Estudiantes dirigidas por Mario Roberto Alvarez, hasta la pelea
de talleres en la FAU de Borthagaray y Casares o la etapa provocadora
del "nac & pop".
"Con
predominio de la acción sobre la representación, del
´método` de determinación por sobre el sistema de
composición, de la materialidad sobre la idealidad",
opinante, audaz, superior a sus medios, la arquitectura de Rosario
supera la dimensión de desafío y orgullo provinciano
y se inserta con calidad y conocimiento de sus límites en
los debates intelectuales contemporáneos. Es mérito
de esta publicación el reflejar la dinámica de esta
"movida" rosarina.
MC

Rosario
1998-2003 / arquitectura con identidad, fue compilado por Hernán
Bisman y Claudio Robles (a quienes agradecemos su colaboración
y la autorización para reproducir las imágenes que
ilustran esta nota) , editado por Bisman
& Robles en 2004, y tiene 324 páginas de 21
x 15 cm. El desarrollo comercial y la coordinación general
estuvo a cargo de Manuel
Ongaro MKT ARQ.
El
párrafo final de esta nota comienza con un fragmento del
programa fundacional de la Cátedra Barrale (Taller de Proyecto
Arquitectónico I, II y III, Facultad de Arquitectura, Planeamiento
y Diseño, UNR), formulado por su primer titular e inspirador,
Carlos Galli.
Ver
Una
ciudad "inevitable" en tiempos de renovación,
primera parte de esta nota, en el número 33 de café
de las ciudades. Al final de dicha nota se proponen vínculos
de interés, que también son oportunos para esta nota.
Ver
la nota ¿4000 viviendas
para Rosario? en este número de café
de las ciudades.
Ver
la nota Puerto
San Martín, al ritmo de la soja, publicada en
La Nación del 16 de julio.
Sobre
la opinión de Rafael Iglesia acerca del edificio de Adelman,
Fourcade y Tapia en la Avenida del Libertador, Buenos Aires, ver
Otras
publicaciones en el número 14 de café
de las ciudades.
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