
Foto:
eltucumanodigital.com.
Nuestras
lectoras Rosario Solá y Mariel Sosa Paz nos han hecho
llegar en las últimas semanas una nutrida información
acerca de las movilizaciones que un grupo creciente de
ciudadanos está realizando en las ciudades de Salta
y Tucumán, en el Noroeste argentino, en defensa del
patrimonio urbano arquitectónico amenazado por su venta
y/o demolición.
La coincidencia
de estas acciones y otras similares en varias ciudades como,
por ejemplo, Rosario, Tigre o la propia Buenos Aires, resulta
significativa por varias razones. En primer lugar (y para
envidia de los expertos en mercadeo que tanto se excitan
con esa cosa de nombre tan horrible, el "marketing viral"...),
la cantidad de gente involucrada en este tipo de manifestaciones
ha crecido en muy poco tiempo de un modo exponencial. Por
otro lado, su reivindicación estaría indicando
la entrada en la agenda política, social y cultural
de una reivindicación ligada al territorio, al desarrollo
urbano y a la arquitectura. Nos encontramos así ante
una
reivindicación política territorial,
en un país en el cual el territorio había
sido poco menos que excluido de la agenda política,
en un país en el cual se pueden ganar elecciones en
la Ciudad de Buenos Aires sin hablar de políticas urbanas
o reduciéndolas a una cuestión de baches (y
quienes han leído café
de las ciudades a lo largo de estos años
saben que no hablo solamente de la última elección,
sino de todas las que se realizaron desde la obtención
de la autonomía y la elección popular del Jefe
de Gobierno)
La naturaleza
del fenómeno y de su objeto merecen análisis
más amplios: que liguen, por ejemplo, esta defensa
de las identidades culturales a la cuestión Global
vs. Local, uno de los debates más fuertes de nuestro
tiempo. O desde la especificidad patrimonial, la búsqueda
de una diagonal superadora entre la indiferencia elitista
o comercial de alguna parte de la disciplina arquitectónica
y la visión "té canasta" de
algunos bienintencionados (como Sergio Kiernan haciendo el
panegírico de la Torre Grand Bourg desde el M2
de Página 12).

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eltucumanodigital.com.
María del Rosario Solá es arquitecta especializada
en Patrimonio Arquitectónico y escritora. El 19
de marzo publicó la nota que reproducimos a continuación
en el diario Salta
Libre:
Perdimos la "manzana de las luces salteña"
- Escuela Zorrilla, no hay mucho qué festejar
A dos
años del bicentenario de la Revolución de Mayo
demolemos edificios que fueron testigos de la misma. Si a
la Ciudad de Buenos Aires se le demoliera la Manzana de las
Luces sería un escándalo. Para que ciertas cosas
no sigan sucediendo hay que explicarlas bien. No es
lo que hace hoy la prensa local cuando anuncia la demolición
del más valioso patrimonio arquitectónico argentino
como una simple refacción de una escuela.
No culpo
al periodismo. La cadena de desafortunadas tomas de decisiones
que llevaron a este disparate demanda que los hechos se digan
a medias o con eufemismos. Pero es importante que la comunidad
salteña sepa qué sucedió, no para culpar
a nadie, simplemente para que ya no suceda.

Siempre
es bueno inaugurar aulas nuevas. Pero veamos que pasó
entre medio y cual fue el costo de estas. Observemos la foto
aérea arriba (década del ‘70).
A la derecha,
la calle 20 de Febrero. La escuela Zorrilla, hoy casi totalmente
demolida, forma una ele. De los cuatro patios claustrales
había tres en hilera de derecha a izquierda. Solo
se salvó el primero, el menos antiguo, de tendencia
historicista italianizante y cuya fachada da sobre la calle
20 de Febrero. Los tres claustros coloniales siguientes, convento
mercedario del s. XVIII, fueron demolidos. El quinto patio
o fondo en el corazón de manzana, hoy casi totalmente
cubierto, albergaba parte del cementerio colonial y de las
guerras de la independencia de Salta.
Salta
demolió los tres patios del convento mercedario del
s. XVIII, uno de ellos, el segundo observando los patios de
la foto de derecha a izquierda, era el patio claustral lateral
de la iglesia de La Merced (demolida a principios del s.XX)
que era la iglesia Matriz de Salta en tiempos de la declaración
de nuestra Independencia y el centro de la vida social y política
de la ciudad. Esta iglesia se encontraba, precedida de una
plazoleta, en la esquina de Caseros y 20 de febrero.
Mientras
Buenos Aires se prepara para festejar el Bicentenario con
edificios de 1910, nosotros en Salta, a dos años del
festejo del Bicentenario hemos demolido edificios que estaban
en perfecto estado y que estaban en pie en 1810. Increíble.
Pero sigamos
con la historia. El convento mercedario se transformó
en la segunda mitad del s.XIX en el segundo Colegio Nacional
del país, fundado por Bartolomé Mitre. Se le
agregaron galerías italianizantes. El sótano
colonial del convento, abovedado y que daba acceso a los túneles
jesuíticos (según innumerables testimonios de
ex alumnos de la malograda escuela) albergaba además
los grafittis de ilustres alumnos. Se destacaba el de Miguel
Solá, pionero de la conservación del patrimonio
en la Argentina.
El fondo
del colegio, al centro arriba y a la izquierda de la foto
de la manzana, era desde tiempos fundacionales parte del cementerio
principal de la ciudad. Cuando se cavaron las bases se encontraron
cinco niveles de enterramientos. Fueron tapados con hormigón.

Restos
de la primera demolición de los claustros del antiguo
convento, año 2005
En medio
de las demoliciones se lo declaró Monumento Histórico
Nacional. ¿Qué se declaró Monumento Histórico
Nacional? ¿El patio que se salvó de la catástrofe?
¡Qué vergüenza!
Siempre
es auspicioso inaugurar una escuela nueva, pero en los países
cultos a los que tanto se pretende imitar no se construyen
sobre tesoros artísticos y reservorios arqueológicos
o túneles jesuíticos. Se buscan otros terrenos.
Por otra parte, Argentina ha firmado numerosos tratados y
convenios internacionales que le dan a la conservación
del patrimonio carácter constitucional.

1)
El patio nuevo y abajo el segundo patio, que en 2005
todavía estaba en pie y que hoy ya está demolido

2)
El patio que se anuncia como remodelado, arriba, foto de Iruya.com.
Abajo, el mástil en el patio original demolido. Es
lo único que quedó.
(Fotos de Myriam Ferreyra)
RS
La tucumana
Mariel Sosa Paz, quien nos tuvo al tanto de las marchas en
su ciudad, nos escribió el 12 de marzo para decirnos:
"Amigos comparto la alegría de hoy. Nos enteramos
por noticia de primera pagina de La
Gaceta: ¡marcha atrás con la venta del patrimonio!
Ganó la unión de la población por el
bien común".

"Protegido.
El histórico edificio de San Martín y Maipú
volverá a integrar el listado de bienes del patrimonio
público".
La Gaceta / Jorge Olmos Grosso
Fin de una polémica - El Gobierno resguardará
los inmuebles históricos
Alperovich
confirmó que la Legislatura aprobará un proyecto
de ley para derogar la norma que permite la venta de los edificios
centenarios - Hubo 12 marchas alrededor de la plaza Independencia.
Doce marchas
se concretaron entre el viernes 21 de diciembre y el viernes
7 de este mes alrededor de la plaza Independencia. A lo largo
del período de reclamo, las movilizaciones en rechazo
a la decisión oficial de vender inmuebles que formaban
parte del patrimonio histórico fueron siendo cada vez
más masivas. Asistieron ciudadanos autoconvocados,
referentes empresariales y profesionales, y dirigentes políticos
de la oposición.
"Yo
tengo que buscar las cosas que nos unan a los tucumanos, y
no las que nos desunan". Con esa frase, el gobernador
José Alperovich justificó la decisión
de derogar la polémica Ley 7.990, por la que en diciembre
se desafectaron del sistema de patrimonio a seis inmuebles
históricos, entre ellos el de la Dirección
de Rentas (San Martín y Maipú).
Tras el guiño de la Casa de Gobierno, en la Legislatura
ya se comenzó a elaborar el texto de la norma que se
aprobará en la sesión del viernes. El proyecto
llevará formalmente la firma del vicegobernador, Juan
Manzur. "A partir de la nueva norma, todo quedará
como estaba entonces, nada se va a vender. Si estos temas
nos desunían, había que eliminarlos", insistió
el mandatario provincial en declaraciones a La Gaceta. Con
esta decisión, el Poder Ejecutivo le pone punto final
a una polémica que llevaba 83 días y que motivó
la concreción de 12 marchas de ciudadanos, referentes
empresariales y dirigentes políticos opositores alrededor
de la plaza Independencia.
La ley
que será derogada esta semana fue sancionada por el
oficialismo parlamentario el 20 de diciembre. Mediante ese
texto fueron desafectados inmuebles de la Ley 7.535, que establecía
un sistema de protección del patrimonio. Los inmuebles
desafectados son seis: el del Siprosa (Mendoza y Rivadavia),
la ex sede de la Dirección de Comercio (San Martín
730), la playa de estacionamiento de 24 de Septiembre 570,
la sede de las Juntas de Clasificación Docente (Córdoba
759/765) y la manzana de Sarmiento al 800 (Secretaría
de Educación), además de la actual sede de Rentas.
"No
estamos viviendo momentos en los que se deba discutir. Por
el contrario, es el momento de sumar para toda la sociedad",
aseveró el gobernador. En efecto, el mandatario provincial
hizo alusión a la docena de manifestaciones que se
concretaron en señal de protesta y en reclamo de
una política oficial de resguardo para los inmuebles
centenarios.
(…) Una
historia que duro 83 días:
1- El
20 de diciembre de 2007, por mayoría, la Legislatura
aprobó la Ley 7.990, que liberó del sistema
de tutela estatal a seis inmuebles históricos.
2- Un día después, un grupo de ciudadanos y
referentes de entidades intermedias realizaron una protesta
en la plaza Independencia en contra de la decisión
oficial.
3- El 4 de enero se presentó ante la Justicia una acción
de amparo colectivo. Fue rubricada por la Junta de Estudios
Históricos y por el Colegio de Arquitectos.
4- El 11 de enero, por pedido del Gobierno, renunció
la directora de Patrimonio Cultural, Jorgelina García
Azcárate. Esta se opuso a la venta de los inmuebles.
5- También renunciaron al Ente Cultural la directora
de Letras y Pensamiento Crítico, María Blanca
Nuri, y el director de Teatro del organismo, Pablo Parolo.
6- En la última semana de febrero, el PE abrió
una instancia de diálogo. Tras la duodécima
marcha, el gobernador anuncia la derogación de la Ley
7.990.
JOG
Finalmente,
Rosario Solá, en relación a las semejanzas entre
ambos casos, nos comenta: "Pero hay una diferencia
sustancial con Tucumán. En Salta los que demolieron
el convento no son ni el Gobernador ni el Secretario de Obras
Públicas: es el propio organismo Provincial de Conservación
del Patrimonio ( DEPAUS), avalado por altas "momias"
nacionales desde hace 30 años... Y quien firma el proyecto
para construir sobre el cementerio colonial y destruir los
túneles jesuíticos es, además de funcionaria
provincial, la actual delegada ante la CNMNyS. Pequeño
detalle…".
Desde
la discusión urbana contemporánea, las noticias
que nos llegan del Norte (el nuestro, en este caso...) traen
a la memoria la muy reciente y también "espasmódica"
(por la rapidez de su gestación, por la virulencia
de las protestas, por sus consecuencias sobre la gestión
urbana) polémica de "las torres". En ambos
casos, cuestiones urbanas latentes a partir de la inexistencia
o la deficiencia de las normativas; en ambos casos, conflictos
que se hacen evidentes a partir de que la reactivación
económica dispara el interés inmobiliario por
determinados predios o productos; en ambos casos, movilizaciones
ciudadanas de inesperado alcance y masividad que desorientan
a la gestión política y se "cuelan"
en su agenda.
MC
Sobre el patrimonio del Norte Argentino, ver también
en café
de las ciudades:
Número
40 I Lugares
Quebrada
de Humahuaca, del patrimonio a la innovación
I Los desafíos culturales, sociales y ambientales
en el norte andino argentino. I Marcelo Corti
Número
60 I Mensajes al café
Blogs
de Concepción del Uruguay y San José de Costa
Rica, saludos e invitaciones desde La Paz y Bogotá,
y un reclamo por el Abasto tucumano.
Sobre
patrimonio y políticas territoriales argentinas (o
su ausencia...), ver también en café
de las ciudades:
Número
56 I Política de las ciudades
La
necesidad de políticas territoriales.
I Asuntos pendientes de Buenos Aires. I Marcelo Corti
Número
44 I Cultura de las ciudades
El
patrimonio cultural de Buenos Aires I No se
cuida lo que no se quiere. I Sonia Berjman
Número
32 I Cultura de las ciudades
Participación
Ciudadana, Patrimonio Cultural y Desarrollo Local I
Instrumentos de memoria colectiva. I Gabriela G. Abarzúa
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