Los lectores enviaron los siguientes mensajes
a cartas@cafedelasciudades.com.ar
La nota Citizen
Semiotic,
en el número 30 de café
de las ciudades, funciona realmente como una estimulante
matriz perceptual para crear historias acerca, dentro, fuera, contra,
al margen de la ciudad. Leerla es un verdadero placer, tanto como
las citas.
María
Berns ("a reader on the border of two cities"),
El Paso
-------------------------------------------------
: -------------------------------------------------
Espero que la
charla de Jordi Borja en el café Tuñón se publique
en café
de las ciudades lo antes posible para que los que nos
encontramos fuera de Buenos Aires nos enteremos de la discusión
con este importante urbanista.
Atentamente
Margarita Méndez
G., Santiago
N. de la R.:
El texto de la charla en el Tuñón, también
solicitado por otros lectores, se publicará en el próximo
número, como continuación de la nota La
Revolución Urbana.
-------------------------------------------------
: -------------------------------------------------
En
los últimos años, numerosos especialistas han hecho
hincapié en un nuevo fenómeno, al que denominaron
la "festivalización" del urbanismo, refiriéndose
específicamente a la creciente realización de eventos
espectaculares y masivos como herramienta de atracción de
actividades, turismo, inversiones, etc.
En nuestra ciudad
podríamos citar algunos ejemplos de este fenómeno,
pero estamos convencidos que la lista no incluye a la fiesta anual
de San Patricio (patrono irlandés), que tiene lugar todos
los 17 de marzo en el barrio porteño de Retiro. Se trata,
en realidad, de una "celebración" que está
ligada más bien a la imposición de tradiciones foráneas,
y que al menos en nuestro país tiene un único motivo
convocante: el consumo (de alcohol, en este caso).
Es cierto que
en la Argentina reside la principal colonia irlandesa en países
no anglófonos, pero también es verdad que la fiesta
tiene poco de conmemoración, teniendo en cuenta que casi
la totalidad de sus jóvenes participantes no tienen la más
remota idea de quién San Patricio ni de cuál es el
motivo de la celebración.
Por todo esto,
no es erróneo afirmar que estamos frente a una conmemoración
artificial, impulsada por los pubs de la zona con el único
objetivo de vender más alcohol, con resultados que difícilmente
puedan ser positivos.
Este año,
esta particular fiesta congregó a unas 50.000 personas en
un espacio notoriamente reducido, como es el de las calles Reconquista
y San Martín, entre las avenidas Córdoba y L. N. Alem.
Como sabemos, se trata de una zona de transición dentro de
un barrio residencial que está retrocediendo por la presión
de las oficinas y los negocios comerciales.
Hay una realidad
que es innegable: cada año la convocatoria es mayor y, por
ende, sus repercusiones son más evidentes: los ruidos molestos,
la suciedad, las peleas, los robos, el consumo excesivo de alcohol,
la venta ilegal, la falta de baños públicos, ya verificados
en ediciones anteriores, volvieron a marcar en marzo pasado un nuevo
y lamentable récord.
En verdad, los
disturbios y el descontrol no hacen sino demostrar la imposibilidad
de realizar este tipo de festejos dentro de la trama urbana. Por
eso, creemos que sería deseable que en el futuro se realizaran
en lugares al aire libre pero cerrados o alejados de las viviendas,
como podría ser algún parque o estadio de fútbol.
Nunca más cierto aquello de que los derechos de uno terminan
cuando empiezan los de otros. En este caso, los sufridos vecinos.
Luis Lehmann
(Presidente de la Asociación
Vecinal de Retiro), Buenos Aires
N. de la
R.: ver la nota La
fiesta de San Patricio en Buenos Aires, en el número
30 de café
de las ciudades.
-------------------------------------------------
: -------------------------------------------------
Agradecemos
los mensajes y el aliento de Sonia Berjman, Marcela Castillo, Adriana
Ciocoletto, Silvina Felici, Edmundo Hernández, María
E. Jorcino de Aguilar, Liliana Lukin, Hernán Munita, Fabio
Quetglas, Alejandro Rossi Grosso, y a todos los suscriptos del mes
de abril.
Con especial
agradecimiento a Gloria Henao González.
|